El otro día fuimos a ikea, por que las mamás (que andaban de paseo visitandonos, disfrutando del "rico" calor de barcelona) querían ir a comprar algunos cachureos y ver diseños de muebles.
En eso andábamos felices, cuando se nos ocurrió pasar a tomarnos un café con una pasta al restaurante que hay allí, de esos super baratos donde te dan la pasta y el café por un euro.
El problema fue que nos fuimos ... bajamos, seguimos mirando un buen rato cosas, y de repente veo a la bárbara aparecer blanca, corriendo escaleras arriba porque se dio cuenta que le faltaba la cartera!
llegamos arriba y la cartera estaba, pero faltaba solamente la billetera, con tarjetas de credito, tarjeta de identidad, etc... menos mal que yo andaba con el numero de anulacion de tarjetas, así que llamamos y no alcanzaron a gastar nada.
Menos mal que la tarjeta bicing la andaba trayendo yo.